Complejo episodio durante operativo municipal en San Bernardo

Un lamentable hecho ocurrió recientemente en la comuna de San Bernardo, donde un funcionario municipal fue agredido físicamente por comerciantes ambulantes durante el ejercicio de sus funciones. Este suceso, además de generar conmoción en la comunidad, pone en evidencia una problemática urgente que afecta a nuestras calles: la creciente tensión entre el comercio informal y la autoridad pública.

Desde la Municipalidad de San Bernardo, repudiamos enérgicamente cualquier acto de violencia, especialmente cuando va dirigido a quienes cumplen una labor pública orientada al orden, la seguridad y el bienestar de todas y todos los vecinos.

Los funcionarios municipales no solo representan a la administración local; son trabajadoras y trabajadores que, día a día, velan por el cumplimiento de normativas que buscan garantizar espacios seguros, inclusivos y accesibles para la comunidad. La violencia no puede ni debe ser una forma de protesta ni de respuesta ante procedimientos institucionales.

El comercio ambulante, una realidad compleja

Entendemos que el comercio ambulante es una manifestación de necesidades económicas reales. Muchas veces, detrás de cada puesto en la calle hay historias de esfuerzo y supervivencia. Sin embargo, esto no justifica la ocupación desregulada del espacio público ni, mucho menos, la agresión a quienes trabajan por el bien común.

El desafío, por tanto, está en encontrar soluciones conjuntas: planes de regularización, espacios habilitados, oportunidades de emprendimiento formal y diálogo constante. Como municipio, reiteramos nuestra voluntad de avanzar en estas materias, pero siempre dentro del marco del respeto, el orden y la legalidad.

Llamado a la comunidad

Lo ocurrido debe hacernos reflexionar sobre el tipo de convivencia que queremos construir en San Bernardo. Necesitamos una comunidad donde prime el respeto mutuo, el diálogo y la colaboración. La violencia solo nos aleja de ese objetivo común.

A nuestro funcionario agredido, expresamos todo nuestro respaldo, solidaridad y el compromiso de tomar todas las medidas necesarias para garantizar su bienestar y el de todos nuestros equipos en terreno.

Reafirmamos nuestro compromiso con una comuna más segura, ordenada y respetuosa para todos y todas.

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Los funcionarios municipales no solo representan a la administración local; son trabajadoras y trabajadores que, día a día, velan por el cumplimiento de normativas que buscan garantizar espacios seguros, inclusivos y accesibles para la comunidad. La violencia no puede ni debe ser una forma de protesta ni de respuesta ante procedimientos institucionales.

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El desafío, por tanto, está en encontrar soluciones conjuntas: planes de regularización, espacios habilitados, oportunidades de emprendimiento formal y diálogo constante. Como municipio, reiteramos nuestra voluntad de avanzar en estas materias, pero siempre dentro del marco del respeto, el orden y la legalidad.

Llamado a la comunidad

Lo ocurrido debe hacernos reflexionar sobre el tipo de convivencia que queremos construir en San Bernardo. Necesitamos una comunidad donde prime el respeto mutuo, el diálogo y la colaboración. La violencia solo nos aleja de ese objetivo común.

A nuestro funcionario agredido, expresamos todo nuestro respaldo, solidaridad y el compromiso de tomar todas las medidas necesarias para garantizar su bienestar y el de todos nuestros equipos en terreno.

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Los funcionarios municipales no solo representan a la administración local; son trabajadoras y trabajadores que, día a día, velan por el cumplimiento de normativas que buscan garantizar espacios seguros, inclusivos y accesibles para la comunidad. La violencia no puede ni debe ser una forma de protesta ni de respuesta ante procedimientos institucionales.

El comercio ambulante, una realidad compleja

Entendemos que el comercio ambulante es una manifestación de necesidades económicas reales. Muchas veces, detrás de cada puesto en la calle hay historias de esfuerzo y supervivencia. Sin embargo, esto no justifica la ocupación desregulada del espacio público ni, mucho menos, la agresión a quienes trabajan por el bien común.

El desafío, por tanto, está en encontrar soluciones conjuntas: planes de regularización, espacios habilitados, oportunidades de emprendimiento formal y diálogo constante. Como municipio, reiteramos nuestra voluntad de avanzar en estas materias, pero siempre dentro del marco del respeto, el orden y la legalidad.

Llamado a la comunidad

Lo ocurrido debe hacernos reflexionar sobre el tipo de convivencia que queremos construir en San Bernardo. Necesitamos una comunidad donde prime el respeto mutuo, el diálogo y la colaboración. La violencia solo nos aleja de ese objetivo común.

A nuestro funcionario agredido, expresamos todo nuestro respaldo, solidaridad y el compromiso de tomar todas las medidas necesarias para garantizar su bienestar y el de todos nuestros equipos en terreno.

Reafirmamos nuestro compromiso con una comuna más segura, ordenada y respetuosa para todos y todas.